¿Qué es?

El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad reumatológica autoinmune que puede afectar a cualquier sistema de nuestro organismo.

Existe una amplia variación en la incidencia a lo largo de todo el mundo. Es más común en mujeres que en hombres y puede presentarse a cualquier edad, aunque lo más frecuente es que se inicie en la juventud.

¿ Cómo se produce?

Como en la mayoría de las enfermedades autoinmunes, la etiopatogenia es multifactorial. El LES se caracteriza por una rotura de la tolerancia inmunológica. El sistema inmunológico del cuerpo en condiciones normales produce proteínas llamadas anticuerpos para proteger al organismo de virus, bacterias y otras sustancias extrañas denominadas antígenos. En una enfermedad autoinmune como el lupus, el sistema inmunológico se “confunde” y no diferencia entre las partículas extrañas (antígenos) y las propias células o tejidos, y produce anticuerpos en contra de “sí mismo”. A estos anticuerpos se les llama “autoanticuerpos” y son los responsables de la enfermedad.

Síntomas

Como su nombre indica, es una enfermedad sistémica; esto quiere decir que sus manifestaciones pueden ser muy variadas y afectar prácticamente a todos los tejidos y órganos; aunque en el 80% de los casos presentan afectación cutánea y articular. Por otro lado, cada persona tiene un patrón diferente de la enfermedad, lo que dificulta el diagnóstico.

Se trata de una enfermedad crónica, en la que la afectación orgánica persiste durante un largo periodo de tiempo e incluso toda la vida, pero no siempre se tienen síntomas, ya que por lo general cursa por brotes (periodos de actividad de la enfermedad), mientras que otros periodos son de inactividad o remisión.

Diagnóstico

El diagnóstico se basa en criterios clínicos y analíticos. Dentro de la analítica se solicitan análisis de sangre y orina, lugares donde el paciente con lupus puede presentar anomalías. Dentro de los hallazgos más frecuentes, se encuentran cifras de linfocitos o leucocitos más bajas de lo normal. Pero las pruebas más importantes serán las que detectan la producción de lo que antes hemos llamado autoanticuerpos.

Tratamiento

El abordaje del tratamiento está basado en las necesidades específicas y los síntomas de cada paciente. Como el lupus puede afectar a diferentes órganos del cuerpo, que varían según el paciente, el tratamiento será personalizado, siendo además importante hacer hincapié en la importancia de los controles médicos en Reumatología, cuya frecuencia dependerá de la situación clínica.